Desfet

¿UNA VOZ EN MI CABEZA? “¿Quién soy yo?” –esa es la pregunta que el ego evita a toda costa. Tras hacerte seriamente esta pregunta en tu interior, escucha lo que te dice esa voz que vive contigo en tu mente: eso es tu ego. Y si dices: “¿Qué voz? Yo no oigo nada”. El que habla es precisamente esa voz en tu cabeza, el pensador, la mente no observada, es decir, tu ego. ¿Eres capaz de reconocer esto aunque sea sólo por un instante? Observa qué pasa cuando dices: “Yo soy”. Sí, yo soy, pero ¿qué? -pregunta tu ego. Decir “soy ser, simplemente” deja insatisfecho a tu mente. ¿Por qué? Es como si una entidad te hubiera poseído y viviera en tu cerebro desde hace tanto tiempo que no eres ya capaz de reconocerla sin un examen íntimo y sostenido. Algunas personas recuerdan bien esa vez que dejaron de identificarse con sus pensamientos. Para otras ocurre de manera tan sutil que apenas se dan cuenta de ello y, quizá aunque sólo sea por unos instantes, notan una cierta liberación, como si se quitaran un peso de encima, o una alegría serena, una paz interior, familiar pero de normal desconocida. Los locos están absortos en sus pensamientos y hablan sin cesar consigo mismo en voz alta, inconscientes de la gente y del contexto. Los cuerdos que llaman a esas personas “locos” hacen algo parecido sólo que mentalmente, no en voz alta. La diferencia es de grado no de género. No es sano estar bien adaptado en una sociedad enferma y demente. A menudo “lo normal” es lo más absurdo y loco… Tú ya lo sabes, ¿o no?